martes, 30 de noviembre de 2010

Democracia

Una de las características del Estado Moderno de Derecho es la democracia.


 

La democracia en de forma por demás sencilla de define como el gobierno del pueblo.


 

De acuerdo con el Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia Española, la Democracia se entiende como la "doctrina política favorable a la intervención del pueblo en el gobierno", así como el "predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado."


 

En ese sentido de conformidad con los artículos 39 y 40 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), la participación del pueblo es necesaria para el gobierno, y este es el medio de beneficiar a aquel.


 

Acerca del carácter que tiene la democracia en México, podemos estar a lo señalado en el artículo 3 de la CPEUM que en su fracción II inciso a) se establece:


 

"no solamente como una estructura jurídica y un régimen político, sino como un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo".


 

Bajo esa tesitura la democracia no es solo una forma de gobierno o de elegir gobernantes, es más no se agota por la existencia de un sistema multipartidista o con la emisión del sufragio en las elecciones.


 

La democracia como ejercicio político y como forma de vida, se construye día a día con la participación de todos y por supuesto con el mejoramiento de nuestros niveles de vida, aun cuando esto último no se tan palpable o tan general como quisiéramos millones de mexicanos.


 

Al hablar del nivel de vida de los mexicanos, más 112 millones según los últimos datos del INEGI, no podemos dejar de señalar la situación de crisis que se vive en la actualidad.


 

Crisis que se presenta en todos los aspectos, desde el económico, hasta el de la seguridad, pasando por el social, el cultural y hasta el académico.


 

En ese sentido, los problemas que aquejan al país son muchos y muy complejos.


 

Cualquier comentario que se haga acerca de los problemas que aquejan a México, debe de alguna manera y en la humilde opinión de quien escribe, de tomar en consideración la participación de la ciudadanía para la atención y la resolución de los mismos.


 

Lo anterior no implica de ninguna manera relevar de sus responsabilidades al Gobierno, ni establecer un sistema donde la prestación de los servicios este concesionada a la Iniciativa Privada, sino que las acciones para mejorar la situación sean desarrolladas y aplicadas por los mexicanos en su conjunto.


 

Esto cobra importancia en atención que en un año aproximadamente estaremos ya en un periodo tendiente a la próxima elección presidencial, la correspondiente al periodo 2012-2018.


 

Pero no podemos dejar de señalar que han sido bastantes los actores políticos que no solamente han mostrado su deseo de contender sino que ya han estado trabajando en su plataforma electoral y en la infraestructura para "comprar" el voto de miles de mexicanos.


 

Ante un panorama totalmente electoral, o quizá más bien electorero (por la "compra" de votos) y por la citada crisis que sufre el país, no solo en lo económico, en donde basta ver los niveles de pobreza, desempleo, tasas de ahorro y de interés; sino también en lo cultural, lo académico y por supuesto en materia de seguridad.


 

Por ello las próximas plataformas electorales que nos sean presentadas deben cubrir toda una serie de expectativas de la ciudadanía en general.


 

Pero gran parte del problema no es la presentación de la plataformas, sino más bien la ejecución de las mismas, ya que de otra forma solo estaríamos en presencia de una serie de buenos propósitos e ilusiones que en nada van a beneficiar al país.


 

En ese sentido es donde va a cobrar importancia la participación de la ciudadanía en el ejercicio de la democracia, la cual no se agota con la emisión del voto.


 

México requiere la formación de un gran frente ciudadano y político que nos permita llegar a los acuerdos necesarios para salir adelante, no se trata de emitir el voto de "carro completo", para asegurar el cumplimiento de las metas y proyectos presentados, sino de que todos lo actores, políticos, sociales y económicos, lleguen a acuerdos sobre las metas y las formas, este país no lo va una sola persona adelante, aunque se quiera vender como el "Mesías", requiere de la participación de todos.


 

Es necesario un cambio en la forma de pensar y de actuar en la gran mayoría de los mexicanos, debemos darnos cuenta que son los cambios en nuestra forma de actuar y de pensar lo que poco a poco van a generar el cambio nacional que el país requiere, no de un decreto, acuerdo o ley que nos indique que debemos cambiar.


 

Desde mi particular punto de vista es necesario, que los mexicanos nos demos cuenta de las opciones que tenemos y analices cada una de ellas en su conjunto, y en su caso elegir la mejor.


 

No podemos dejar de señalar los errores de los gobiernos, pero también debemos sopesar sus aciertos y programas, no para destruirlos mediante la crítica inmisericorde, sino en proponer y ajustar aquello que haga falta para que funcionen.


 

En ese sentido y sin que haya ningún afán partidista detrás, es necesario que los mexicanos empecemos a proponer acciones para mejorar, acciones que pueden ser personales, como ahorro de agua, comportamiento social, hasta acciones colectivas, pasando por familiares y vecinales o comunales.


 

Es momento de revisar con detenimiento nuestro comportamiento y a partir de ello proponer medidas para mejorar y no se trata tampoco de propuestas de año nuevo (también es extremo cercano), sino de verdaderos compromiso para un cambio.


 

Si en este momento cada persona decidiera cambiar tres cosas en su entorno estaríamos dando un paso adelante.


 

Un cambio personal, un cambio en relación con la familia y un cambio social o en el ejercicio de su labor profesional o en el ámbito académico empezara a hacer la diferencia.


 

Es momento de reflexionar en el México que queremos para nosotros pero también para nuestros hijos, pero lo más importante es momento de ACTUAR, hoy ¡!!!


 

miércoles, 10 de noviembre de 2010

La Educación en México

Un tema fundamental para el desarrollo del país, es por supuesto el de la educación, al menos desde el punto de vista formal, lo que para muchos autores es más bien la instrucción.


 

En el caso de México, a partir de lo dispuesto por el artículo 3 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, toda persona tiene garantizada al menos constitucionalmente, el derecho a recibir instrucción por lo menos hasta el nivel secundaria, la cual además será gratuita.


 

Desafortunadamente dicha previsión, no se cumple a cabalidad, pues no toda persona recibe la instrucción a que se refiere el mandato constitucional, además de que en otros casos la instrucción que se proporciona no es la más adecuada, ya sea por condiciones físicas del lugar, por los instructores o por el estado físico, mental y hasta económico de los propios sujetos a instruir.


 

Respecto al cumplimiento del deber que el citado artículo 3º le impone al Gobierno, no podemos pasar por alto que tanto la ONU, a través de la UNESCO; como la OCDE, han señalado la importancia de la instrucción como un medio para potencializar el desarrollo de un país.


 

En ese sentido basta recordar que la UNESCO ha señalado que un país en vías de desarrollo requiere destinar para mejorar su situación, por lo menos el 8% de su PIUB a la Educación.


 

Por todo lo anterior y en atención a la situación que guarda la educación, basta recordar los resultados de la prueba Enlace, así como el nivel de conocimiento en general de la población, y las oportunidades de preparación de la población joven del país, es que la educación debe ser analizada.


 

Lo anterior cobra importancia por que en este momento y hasta antes del 15 de noviembre del presente año, la cámara de Diputados en ejercicio de la facultad que el impone el artículo 74 de la CPEUM, comenzará a discutir el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para el año 2011.


 

Uno de los rubros del PEF, es el relativo a la educación y no se trata solamente de la partida asignada a la SEP y en particular a la que de alguna forma impacta al SNTE o a la CNTE, sino de algo mucho más importante y grave.


 

Es de todos conocido que un problema actual, y que además tiene trascendencia no solamente económico, sino también social y hasta relacionado con la seguridad tanto pública como nacional, es la falta de oportunidades de miles de jóvenes.


 

Esa falta de oportunidades incluye desafortunadamente la parte "educativa", la preparación y el otorgamiento de herramientas necesarias para salir adelante, y es aquí donde una de las múltiples aristas de la educación y de su presupuesto debe ser analizada de forma amplia correcta y sobre todo libre de intereses partidistas, sino en aras de un mejor país y mejores ciudadanos.


 

La discusión del PEF, debe tomar en consideración el papel que juegan las Universidades Públicas en el país, así como la cobertura que realizan.


 

No podemos pasar por el ato el papel desigual que tiene muchas universidades públicas, ya que no todas reciben los mismo recursos, pero tampoco todas tiene los mismo problemas o coberturas, pero tiene en común que se trata de instituciones encargadas de la preparación de los mexicanos que son necesarios para la activación de la economía.


 

En tanto mayores recursos tengan las Universidades públicas, mayores y mejores serán sus coberturas, o al menos esa debe ser la idea que las mueva, así como el ideal que deben perseguir nuestros notables representantes al momento de asignar recursos.


 

Pero además de la asignación de recursos, de la problemática que ello implica por la disparidad de criterios que se presentaran en el Congreso de la Unión, Cámara de Diputados, hay problemas mucho más graves que deben de hacerse frente al interior de las instituciones educativas, principalmente en las de nivel superior.


 

El primero de ellos es el relativo a la formación o más bien a la aplicación práctica y profesional de valores, que en teoría desde la educación básica y desde los núcleos familiares debían ser inculcados a los jóvenes.


 

No se trata de implementar clases de religión, sino una cátedra de valores para el ejercicio profesional, no solo de teoría, sino una aplicación diaria con los problemas y situaciones reales que esos jóvenes enfrentaran en su vida diaria en el ejercicio de sus profesiones.


 

Valores encaminados a tener una sociedad, más justa, participativa pero sobre todo comprometida con un objetivo común y social que tampoco puede estar alejado del crecimiento y desarrollo profesional personal, sino que debe de hacerlos compatibles y generales a todo mexicano.


 

Es decir, desde mi muy particular perspectiva, las clases de Ética, no deben ser totalmente teóricas, sino que deben priorizar la actuación que diariamente debe de guardar toda persona en su profesión y respecto de los demás, situaciones concretas y que permitan un verdadero cumplimiento de la cultura de la legalidad.


 

Por otro lado, el siguiente problema o aspecto que debe analizarse al interior de las instituciones educativas, es el de la verdadera y adecuada vinculación educativa, la mayoría de las universidades no cuenta con instrumentos de preparación profesional de sus alumnos y egresados, la bolsas de trabajo en poco o nada se relacionan con las carreras que se ofrecen y no hay mucho espacio para el desarrollo de sus propios proyectos productivos, aunado a la ya señalada falta de recursos.


 

Parece un problema simple pero no los es, la vinculación universitaria, tendría que terminar con el problema de las empresas de obtener gente joven con experiencia, entre candidatos jóvenes pero sin experiencia, es decir, la vinculación universitaria, tendría que contemplar un programa de verdaderas prácticas profesionales o distintas áreas, con empresas, entidades o dependencias, que de acuerdo al perfil del estudiante y en el mayor número de áreas posibles, el permitan una capacitación real en las situaciones que deberá de enfrentar en el mundo laboral.


 

Pero además la vinculación universitaria, implica que los nuevos profesionistas, también estén en contacto con la sociedad, atendiendo y resolviendo problemas como los que en un futuro no muy lejano tendrán que atender.


 

Lo anterior implica que debe haber un intercambio centros educativos, sociedad, empresas, el cual debe estar coordinado, para que todos obtengan lo que buscan:


 

  • Egresados altamente calificados y preparados
  • Ofertar fuerza de trabajo para n área especifica estrechamente relacionada con el área de estudio de que se encargan.
  • Fuerza de trabajo calificada y con experiencia en la atención y resolución de los problemas que tienen las empresas.